La lesión vascular causa rápidamente un hematoma masivo y, si no se repara, una pérdida intensa de sangre y el  consiguiente fallo orgánico.   La hemostasia (el cese de la pérdida de sangre desde un vaso dañado) tiene ciertas etapas separadas,  aunque relacionadas entre sí: compresión y vasoconstricción; formación de un trombo hemostásico o trombo blanco  (hemostasia primaria); formación del coágulo de fibrina más estable (hemostasia secundaria), y finalmente, retracción y disolución del coágulo.       
Universidad Autónoma de Sinaloa/ Medina Pérez Luis Rogelio/ 2019 Espacio creado para acercar a todas las personas a conocer más sobre fisiología médica impartida por el Dr. Luis Alberto González

Comentarios
Publicar un comentario